El
Comité Nacional palestino de Boicot, Desinversión y Sanciones (CNB)
insta al Gobierno francés a que cese inmediatamente todas las medidas
antidemocráticas y represivas contra sus propios ciudadanos de
conciencia que promueven o participan en campañas no violentas de
boicot, desinversión y sanciones contra Israel hasta que cumpla con el
Derecho Internacional. El CNB exhorta asimismo al Estado francés a que
respete sus propias obligaciones legales bajo el Derecho Internacional, a
que ponga fin a su papel como principal proveedor de equipos militares a
Israel en la UE, y adopte nuevas medidas, incluidas sanciones, con el
fin de poner fin al ilegal régimen de ocupación, colonialismo y
apartheid de Israel sobre el pueblo palestino.
La Campaña Boicot,
Desinversión y Sanciones (BDS) es una estrategia eficaz, moralmente
legal y no violenta cuya necesidad ha sido confirmada no sólo por la
sociedad civil palestina, sino también por juristas independientes y
expertos en derechos humanos de Naciones Unidas. El CNB reafirma su
apoyo inquebrantable a los militantes franceses perseguidos y hace un
llamamiento a las personas de conciencia y al movimiento de BDS en todas
partes para que redoblen su apoyo a quienes se enfrentan a la
vergonzosa represión del Estado.
El 14 de octubre, después de una
gran manifestación en el exterior de la sala del juicio y una exhibición
mundial de solidaridad con los partidarios del BDS acusados, un
tribunal francés desestimó los cargos de “incitación a la
discriminación, al odio y a la violencia” contra la senadora Alima
Bumediene-Thiery y el destacado activista Omar Slaouti, tras su
participación en acciones para promover el boicot a Israel [1].
Sin embargo, la semana siguiente, se impuso una multa de mil euros
contra la activista Sakina Arnaud por poner una pegatina de ‘Boicot a
Israel’ en un cartón de zumo frutas [2]. El 29 de noviembre, Día
Internacional de Solidaridad con el Pueblo Palestino, no menos de doce
activistas franceses de BDS comparecerán ante el tribunal en Mulshouse
para hacer frente a acusaciones similares [3]. Otros juicios se llevarán
a cabo en primavera y verano de 2011.
Todos los cargos contra los
activistas de BDS han sido interpuestos por el Estado en respuesta a
las quejas presentadas por lobbies pro-israelíes. La autodenominada Oficina Nacional de Vigilancia Contra el Antisemitismo (BNCVA, en sus siglas en francés) y otros grupos pro-israelíes afirman haber presentado más de 80 demandas [4].
Stéphane Hessel, superviviente de un campo de concentración nazi y
diplomático de renombre que participó en la redacción de la Declaración
Universal de los Derechos Humanos, ha sido igualmente demandado por su
apoyo explícito a BDS [5]. El CNB ya ha criticado anteriormente
al primer Ministro francés por hacer insinuaciones infundadas e
incendiarias sobre el movimiento de boicot a Israel [6]. De
acuerdo con activistas, la policía pide sistemáticamente los nombres y
direcciones de los que acuden a las manifestaciones de BDS.
La
sociedad civil palestina, tan ampliamente representada en el CNB, se
muestra atónita de que el Estado francés permita que una senadora tenga
que enfrentarse a cargos delictivos por ejercer su derecho democrático
básico de apoyar, dar voz y actuar de forma no violenta en favor de los
derechos palestinos, y reprima las libertades de sus propios ciudadanos.
Esta alarmante ola de represión del Estado en un país del peso de
Francia es un grave indicador de que, bajo la presión de Israel, algunos
gobiernos europeos están dispuestos a suspender los principios
democráticos y traicionar los derechos civiles cuando se trata de
proteger los crímenes de guerra israelíes y otras infracciones del
Derecho Internacional de la censura y la rendición de cuentas. Esta
complicidad en el encubrimiento de las violaciones israelíes del Derecho
Internacional se ve agravada por los cínicos intentos del gobierno
francés para confundir la oposición a las políticas de Israel —Estado
que ejerce la ocupación y el apartheid— con “odio” y “discriminación”
contra un grupo étnico o religioso. La campaña global de BDS se funda en
el Llamamiento palestino de BDS de 2005 que, inequívocamente, se opone a
toda forma de racismo, incluido el antisemitismo y la islamofobia. El
movimiento palestino de BDS viene haciendo campaña con la máxima
coherencia moral contra el Estado de Israel debido a su multifacético
sistema de opresión contra el pueblo palestino y sus sistemáticas
violaciones del Derecho Internacional. En el movimiento de BDS no hay
consideración alguna respecto a la etnicidad, nacionalidad, religión,
sexo o cualquier otro atributo de identidad.
Tras los llamamientos
realizados por grupos de activistas franceses y del CNB, el movimiento
internacional de BDS y la sociedad civil en general han prestado su
apoyo total y visible al movimiento francés del BDS. Se han organizado
manifestaciones de solidaridad frente a embajadas francesas y en
importantes zonas públicas en Escocia, Irlanda, Italia y Suecia [7].
Militantes de toda Francia y de Bélgica asistieron a una manifestación
ante el tribunal en el que la senadora Alima Boumediene-Thiery y el
activista Omar Slauti fueron absueltos. Parlamentarios y militantes de
todo el mundo enviaron mensajes de solidaridad. Las embajadas de Francia
recibieron cartas de queja. Los activistas franceses están convencidos
de que esta solidaridad es una forma eficaz de resistencia contra la
represión estatal.
Por ello, el CNB tanto, pide a las personas de conciencia y al movimiento global de BDS:
•
Que organice el envío de cartas, peticiones y manifestaciones dirigidas
a las embajadas de Francia en su área local para protestar contra la
represión de los derechos civiles básicos.
• Que incluya
en sus acciones y videos de conmemoración del Día Internacional de
Solidaridad con el Pueblo Palestino formas visibles de apoyo a los
activistas franceses, por ejemplo, banderas y consignas utilizadas por
la campaña francesa contra la represión estatal del BDS, tales como “Yo
también boicoteo. Demándame” [8].
• Enviar más mensajes de solidaridad y apoyo a los activistas franceses a través de frenchsolidarity@bdsmovement.net felicitándoles por haberse comprometido a intensificar sus acciones.
•
Si ello es posible, intentar asistir a la manifestación de solidaridad
ante el juzgado que verá la causa el 29 de noviembre en Mulhouse, al
este de Francia [9].